La Soledad no elegida…

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Dialogámos con Celia Vence, ¿Cómo enfrentamos el envejecimiento de la población? ¿Qué desafíos y oportunidades existen para las personas mayores

La sociedad uruguaya enfrenta un desafío creciente: el envejecimiento de su población.

En este contexto, dialogamos Celia Vence una referente en temas de seguridad social y programas vinculados a las vejeces.

Con 40 años de trayectoria en distintos ámbitos, su mirada crítica y propositiva sobre el rol del Estado y la sociedad en la inclusión de las personas mayores es fundamental para entender los desafíos y oportunidades que tenemos por delante.

El envejecimiento de la población y el rol del Estado

Según datos del censo 2020, Uruguay cuenta con aproximadamente 580.000 personas mayores de 65 años, representando casi el 20% de la población total.

Este fenómeno ha generado una nueva realidad: la existencia de una cuarta y hasta una quinta edad, con personas mayores activas y con proyectos de vida.

Para Vence, es clave que las políticas públicas trasciendan los períodos de gobierno y se conviertan en políticas de Estado.

Uno de los avances en esta línea ha sido la implementación del Sistema Nacional Integrado de Cuidados (SNIC) en 2015, el cual contempla a la infancia, la discapacidad y la vejez.

Para Celia, el Estado tiene la responsabilidad de hacer cumplir las leyes y garantizar derechos.

“Donde hay una necesidad, debe aplicarse un derecho. Y si ese derecho no existe, hay que crearlo”, enfatiza.

El impacto de la exclusión y la falta de accesibilidad

El aislamiento y la soledad no deseada son una de las mayores problemáticas de la vejez. La falta de accesibilidad en espacios públicos e instituciones limita la autonomía de las personas mayores, afectando su calidad de vida.

Vence ejemplifica esto con situaciones cotidianas en Carmelo, donde una persona en silla de ruedas encuentra obstáculos para moverse con independencia, incluso en edificios públicos.

“Una sociedad que no garantiza la accesibilidad está generando exclusión.

Esto no es solo un problema de infraestructura, sino de derechos y calidad de vida”, sostiene.

Además, destaca la importancia de la participación ciudadana en la exigencia de estos cambios, recordando que

“la ciudadanía se construye todos los días, no solo cada cinco años al votar”.

Redes de apoyo y espacios de socialización

Para combatir la soledad y fomentar el envejecimiento activo, Celia Vence enfatiza la necesidad de potenciar redes comunitarias, como los comités de jubilados y centros de actividades.

También propone la creación de hogares diurnos, donde las personas mayores puedan reunirse, compartir actividades recreativas y mantenerse socialmente integradas.

“No se trata solo de cuidados, sino de garantizar espacios de desarrollo personal y social”, afirma.

Otro concepto innovador que menciona es el cohousing, un modelo en el que varias personas mayores comparten un espacio de vivienda con servicios comunes, conservando su autonomía pero con el beneficio de una red de apoyo mutuo.

En este sentido, Vence destaca que la clave está en crear opciones diversas que se adapten a las distintas realidades y necesidades de las personas mayores.

El desafío de cambiar la percepción de la vejez

Uno de los puntos más contundentes de la charla con Celia es su reflexión sobre el concepto de pasividad asociado a la jubilación.

“Hoy por hoy, no permito que digan que soy pasiva. Soy jubilada, pero sigo activa, tengo proyectos y quiero ser visible”, afirma.

Para ella, es fundamental romper con la idea de que la vejez es una etapa de inactividad, cuando en realidad es un período en el que muchas personas siguen participando activamente en la sociedad.

Para cerrar, Celia deja un mensaje claro:

“Las soluciones para las personas mayores deben implementarse hoy, porque mañana puede ser tarde. No queremos ser invisibles. Queremos seguir siendo parte de la sociedad y aportar desde nuestra experiencia”.

Una Charla que nos deja…

El envejecimiento poblacional no es solo un reto, sino una oportunidad para repensar la sociedad en términos de inclusión y derechos.

A través de políticas públicas sólidas, infraestructura accesible y redes de apoyo comunitario, se puede construir un entorno donde las personas mayores no solo vivan más, sino que vivan mejor.

La experiencia y conocimiento de referentes como Celia Vence nos ayudan a comprender que la vejez no es el final de un camino, sino una etapa llena de posibilidades.

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